Son muchas las personas que invierten en una propiedad para luego arrendarla. Pero estos lugares tienen una particularidad que los diferencia y les da un plus respecto al resto: son departamentos amoblados.

Si tienes planes de sacarle unos pesos más al departamento, ésta es una excelente manera. Dale estilo y diseño a cada espacio del lugar, le dará más valor económico.   

Los que buscan departamentos amoblados

Dentro del mercado inmobiliario, quienes optan por esta alternativa son turistas extranjeros que están de paso por Santiago. Vienen por unos días o en el mejor de los casos por varios meses. Algunos llegan para estudiar en las diferentes universidades o por trabajos temporales en alguna empresa.

Es por esa razón que quieren confort, comodidad y practicidad en el tiempo que dure su estadía. Si se trata de una persona, los departamentos amoblados conocidos como estudios o los de un dormitorio son sus preferidos.  

Pero los chilenos no son ajenos a este estilo de vida. Tanto los que dan el salto de vivir solos como los que recién llegan de regiones, son consumidores de este tipo de departamentos.

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Las zonas preferidas

Debido a sus actividades, a estas personas no les importa pagar un poco más para tener beneficios. Buscan zonas en las que haya actividades culturales y gastronómicas, y les es indispensable tener wifi.  

Por supuesto que la palabra conectividad está dentro de sus primeros requisitos. Buscan  tener una estación de metro a pocos pasos, lo que es un factor diferenciador que eligen sin dudar.

Lugares como Lastarria, Providencia o Bellas Artes cumplen muy bien esas necesidades, lo que los hace óptimos para arrendar departamentos amoblados.  

El diseño

Básicamente se apunta a ofrecer espacios que sean luminosos. Respecto al estilo, el minimalista es el preferido. A este tipo de personas les gusta la funcionalidad con espacios abiertos.

Los riesgos del inversor

Un punto en contra que puede llegar a tener el arriendo de estos departamentos es la rotación. Por eso el propietario o arrendatario debe considerar este punto. A veces la persona que vive allí lo hace por tres meses y luego se va. Es ahí cuando se debe ir en busca de un nuevo arrendatario y se pierden semanas sin recibir ingresos.

Actualmente se estila hacer un contrato por determinada cantidad de meses para asegurarse que esa persona permanecerá por ese período de tiempo. De esta forma buscan disminuir los tiempos en los que los departamentos amoblados están sin gente.

Un dato importante para el dueño de un departamento que planea arrendarlo a otros de forma amoblada es que debe pagar impuestos. El SII (Servicio de Impuestos Internos) señala que “las propiedades que se arriendan amobladas deben declarar y pagar IVA por los ingresos percibidos”.  

Aunque en la actualidad existen cada vez más alternativas en cuanto a departamentos amoblados, la alta competencia lleva a que las ofertas sean cada vez más tentadoras para los que quieren arrendar.